El corpus del ocaso

Hay tres jueves que relucen más que el sol, Jueves santo, Corpus Cristi y Día de la Ascensión.

Y en el toro hay varios jueves que empiezan a coger color de incensario. Las lamentables entradas de poco público de las corridas de Toledo y Granada en consecutivos días donde se ha acartelado nada menos que Morante de la Puebla como gancho artístico, debería hacer pensar al establishment de la tauromaquia. Ya sé que el confort de la gestión del último dinero que da la banca, da a pensar poco y estar satisfechos con un ganado de medio pelo, con un espectáculo absolutamente menor y con unas expresiones artísticas entre manieristas y paródicas. Los toreros viven aferrados a un tiempo que ya marchó, los apoderados justifican que el toro siempre ha sido chico en plazas fuera de Madrid y su volcán isidril, pero olvidan que el contexto ya es otro. Cuando los toros eran el gran espectáculo y tenían el tirón de masas, el que saliera un toro anovillado, incluso arreglado en las plazas de segunda, nada importaba, porque el hilo del toreo continuaba y la cotización y el interés de los coletas no decaía. Vivimos una sociedad profundamente antitaurina, y si no ahí está el espejo de México para que alguno lo mire. Y en este contexto amenazado, con competencia de numerosos espectáculos de masas con mejor marketing y atractivos culturales, el toreo es un pariente pobre.


Y quien organiza la corrida de toros de turno se empeña en repetir un estándar, en no preocuparse de la calidad del espectáculo y en pensar que la inercia determina que muchos públicos por ser la fiesta de turno vayan a comprar localidades, sea al precio que sea, y que se va a mantener desde la economía a la grandeza este viejo arte.

La conclusión es que la tristeza de los tendidos toledanos y granadinos debería hacer pensar que estamos ante un auténtico canto del cisne de una una fiesta que ni es nacional, popular ni mayoritaria.

Es una minoría que o se le mima como si fuera un espectáculo más parecido al teatro o la ópera, o será algo clandestino llamado a su consunción.

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